lunes, 18 de julio de 2011

Sollana

Sollana es un pueblo situado en la provincia de Valencia, dentro de la comarca de la Ribera Baixa y dentro del parque nacional de la Albufera, donde en esta época del año una gran parte de su término municipal se convierte en un manto verde por la gran cantidad de arrozales que hay.

Mi mujer y yo tenemos una casa en Sollana y muchos fines de semana vamos a pasarlos allí. Yo suelo salir a pasear entre los arrozales y en esos momentos me suelen venir a la cabeza muchas cosas. Hace dos fines de semana una de las cosas que no paraba de metérseme en la cabeza eran unas declaraciones del ahora ya candidato por el PSOE D. Alfredo P., donde ponía prácticamente de malhechores a directores de sucursales de las entidades financieras por dar hipotecas a personas con ingresos más bien bajos a cambio de comisiones, diciendo que quien pide responsabilidades a estos directivos. Empezando así una particular cruzada partidista y a la vez esquiva contra el sistema financiero.

No quiero disculpar para nada al sistema financiero, ya que desde mi punto de vista el afán de ver como se incrementaban las cuentas de resultados año tras año, daba a entender que todo valía así como que se podía hacer cualquier cosa sin temer nada.

Pero no se puede jugar a ser el Dr. Jekyll y Mr. Hyde a mi conveniencia. Ya que se podría caer en a lo que los políticos llaman “hacer demagogia”.

Cuando ya estamos sufriendo esta crisis económica-financiera desde el 2007 no puede venir alguien, que se supone dirige un país y por tanto tiene que tomar medidas para salir lo antes posible de la misma, y empezar ahora a proclamar quien es el culpable de todo esto. NO. Queremos soluciones.

Y si ese mismo dirigente horas más tarde dice que no nos preocupemos, que sabe como crear empleo, me da mucho que pensar. ¿Por qué?, muy sencillo, la tasa de paro en España en el año 2007 fue del 8%, pasando al 2008 al 13,91%, en el 2009 fue del 18,83% y ya en el 2010 del 20,72%. Si analizamos este periodo de tiempo, la tasa de paro se ha incrementado en un 259%. Todo eso siendo uno de los dirigentes del país D. Alfredo.

¿Qué se tomaron medidas?, es verdad, en enero del 2009 se creó el Plan Español para el Estímulo de la Economía y el Empleo, más conocido como el Plan-E. Su finalidad era la de impulsar la actividad económica de España, movilizando grandes cantidades de dinero público, para hacer frente a la crisis económica. Este plan siempre lo he comparado con la política que propuso Keynes allá por el 1929, pero que en nuestro caso (y según mi opinión) muy mal aplicada, ya que lo único que se consiguió fue que el déficit en España se pasara del 1,9% del 2007 (superávit) al -4,1% en 2008, -11,1% en 2009 y -9,20% en 2010 (aquí ya se aplicaron los famosos recortes impuestos por Bruselas de ahí esa ligera mejoría). Así como un PIB en 2007 del 3,6 siendo en el 2008 del 0,9 y en el año donde se aplica el Plan-E la economía del país decreció hasta el -3,6 (datos obtenidos del Instituto Nacional de Estadística).

Creo que entrar en ese juego de echar balones fuera, solo porque estemos en periodo preelectoral, no nos beneficia a los ciudadanos que somos quienes realmente estamos padeciendo esta crisis, y no nos merecemos que se juegue con nuestra inteligencia de esta manera.

Y hablando del periodo preelectoral, sinceramente, me da pánico. Ya que unos siguen machacando con querer sentarse en el tan ansiado sillón que da derecho a mandar y los otros a mantenerlo a todo costa.

Ya para terminar y continuando con la responsabilidad de los directores de sucursales por dar esas hipotecas, quisiera decir que mientras se vendían inmuebles y se daban a su vez hipotecas, el poder Público gozó de un silencio absoluto porque en cada transacción las Arcas Públicas se llevaban un 7% por el IVA (ahora el 8%) o el 7% del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (si era un acto entre particulares), además del 1% del Impuesto de Actos Jurídicos Documentados del total de la responsabilidad hipotecaría (el equivalente aproximadamente al 1,6% de lo que solicitaba de préstamo hipotecario). Y eso para todas las transacciones que se realizaron en la época fueron muchos miles de millones de euros que el Estado recaudó y que por aquel entonces no importaba demasiado si se concedían hipotecas a personas con pocos recursos.

Pero es más, un director de sucursal hace lo que le mandan, ya que de lo contrario va a la calle por no cumplir con los objetivos que la entidad le ha impuesto. Caso opuesto a lo que ocurre con los dirigentes políticos si no cumplen con su cometido, con el agravante de que algunos incluso por un periodo corto de mandato obtienen como “premio” una renta vitalicia y solo con jurar el cargo y acumular siete años de ejercicio ya pueden jubilarse con la pensión máxima (lo se, esto si que es hacer demagogia, pero al fin y al cabo yo no soy político).