martes, 30 de agosto de 2011

LO LÓGICO DE LO ILÓGICO

En política, parece ser que en muchas ocasiones, la lógica suele brillar por su ausencia. Creo que no hace falta que matice en demasía la anterior frase, ya que pienso que tiene su parte de lógica.

¿Y porque digo todo esto?, muy sencillo. Yo que suelo pensar mucho (así estoy, con una cabeza bastante despoblada y donde aún se resiste el folículo a irse de farra, se ha vuelto blanco), bueno centrémonos. Suelo pensar y veo que los políticos solo ven en dos colores, como ciertos animalitos, en blanco y negro. Me explico. Si un partido plantea cualquier reforma o quiere aprobar una ley o lo que se les pueda ocurrir en un momento dado, diciendo “Señorías, esto es blanco”, acto seguido el otro partido que pueda estar tanto en la oposición como en el poder dirá, “pues nuestro grupo esta totalmente en contra, ya que lo que ustedes plantean es negro”. Y así pasa la vida de los grandes partidos políticos.

Luego están las rarezas, como pasa en la naturaleza. Esos partidos políticos que suelen ver las diferentes gamas de colores que existen entre el blanco y el negro. Según sus intereses particulares, claro está.

Pero estos últimos días, ha pasado algo inaudito en España. Los dos grandes partidos políticos, ven el mismo color (puede ser porque alguna óptica, les ofreciera descuentos masivos a dicho colectivo o por el contrario que el interés partidista y el futuro de sus sillones fuera en ello).

Desde que se aprobó la Constitución Española, y desde que yo recuerde, se ha dado a entender que reformar nuestra Carta Magna era tarea ardua y tanto complicada. Supongo que para no incurrir en reformas banales y que cada cierto tiempo estemos metidos en ello, al tratarse de la columna vertebral de nuestro País.

Pero al parecer, ahora y en menos de una semana, nuestro presidente lo plantea ante las Cortes para fijar el techo a nuestro déficit (suena a una nueva imposición francoalemana) y a ambos partidos políticos PSOE y PP, les han sobrado horas para ponerse de acuerdo.

Uno, al tratarse de un partido “progresista”, siempre alardea de su tolerancia y que siempre tiene en cuenta la palabra del pueblo. Y el otro, que está pidiendo que hable el pueblo desde hace ya bastante tiempo. Pero ahora, ni referéndum ni nada. Rodillo y a otra cosa.

Personalmente, desde que empezó esta maldita crisis económica he echado de menos una política común entre los dos grandes, olvidándose de sus diferencias y preocupándose de lo importante, la gente. Pero ha sido totalmente imposible, durante este periodo, más que nunca su visión era en blanco y negro. Y ahora con prisas se ponen de acuerdo para reformar, nada más y nada menos, que la Constitución Española. ¿Saben que les digo? Para echar a correr.

lunes, 1 de agosto de 2011

COMO PASAR DE UNA PUTA CASUALIDAD A UNA SOSPECHOSA INDISPOSICIÓN MÁS QUE REPENTINA.

A continuación os contaré un relato que tal vez pudo ocurrir o tal vez no, donde todos los personajes que aparecen son posiblemente invención del que escribe, así como que todo parecido con la realidad quizás pueda ser pura coincidencia (Dios, que ganas tenía de escribir esto y quedar tal cual, como en aquellas pelis de antaño).

La verdad es que después de estar unos años sin acudir a un gran festejo que ya cuenta con muchos años de tradición en mi pueblo (todos los que me conocéis sabéis que mi pueblo se llama Sollana), por fin pudimos acudir gracias sobretodo a la benevolencia del calendario al caer dentro de un fin de semana. El festejo en cuestión se trata del homenaje al arroz que en Sollana realizamos a dicho cereal tan extendido dentro del término de la población (el que quiera más información sobre esta fiesta, que le dé al buscador).

El quid de la cuestión es, que en dicha festividad, el Ayuntamiento del pueblo te indica donde estás ubicado para hacer la paella en las calles de Sollana y luego te asigna un sitio para comértela. Este apostillamiento da lugar a un momento “rosa”. Nuestro personaje, hace unos años entró a formar parte de una estadística, la de los divorciados, y como suele pasar, existía un “ex”.

Como dice la Ley de Murphy, “si el Ayuntamiento te asigna un sitio para hacer la paella y al lado tuyo hay otras personas para hacer otra paella, de tantas personas que ese día hacen una paella en Sollana, ¿A quién le tocará hacer la paella al lado de nuestro personaje?”, correcto al “ex”. ¡Oh! Puta casualidad. Momento tenso. Pasados unos segundos, nuestro personaje, su pareja y sus amigos, se relajan y todos continúan con la festividad que tanto tiempo deseaba disfrutar.

Segunda parte de estas tribulaciones, nuestro personaje tiene un familiar, un familiar muy cercano, sangre de su sangre. Que también tiene que acudir a dicha fiesta, pero lógicamente no sabe lo que va a encontrar cuando llegue al sitio donde se está haciendo la paella y cuales son los vecinos.
Al mismo tiempo, y como las personas somos como somos, todos estaban esperando tal momento, por aquello del morbillo. Y ese momento sucedió. “Santa Bárbara Bendita, ¿Qué panorama hay aquí? “, supongo que ese fue su pensamiento. Acto seguido, saludos a todos y sin mediar más palabras, este familiar, se acerca a los vecinos, se pone ha hablar con el “ex” y se acerca de nuevo a nuestro personaje para decirle que tiene una indisposición, que se irá a su casa y cuando esté todo preparado, ya se pasaría por el sitio asignado por el Ayuntamiento para comer. Apostillar también, que este familiar y este “ex”, seguían manteniendo una relación, a sabiendas de que este familiar, sabía de todo lo sucedido, lo mal que lo pasó nuestro personaje, el dinero que le sacó y aquellas pastillas que se tenía que tomar para evitar caer enfermo. Una relación extraña donde la hubiere.

Lo más curioso y como en un relato de ciencia ficción, una hora más tarde ni dolencias ni nada. Y aquí no ha pasado nada, es más hasta tenía ganas de ir luego a la verbena del pueblo a bailar.
Y como lo he dicho al principio, así lo termino: “cualquier parecido con la realidad puede ser pura coincidencia”. O no
.